Con abacá, caña guadúa y palo de balsa, artesanos fabrican los plantados para la flota de Tunacons, que agrupa a 10 empresas de Ecuador, Panamá y EE. UU.
El uso de plantados o dispositivos agregadores a la deriva de peces (FAD), que se utilizan para la pesca de cerco de atunes y que tradicionalmente son hechos con plásticos, está yendo cada vez más hacia la sostenibilidad. Desde 2019, la flota miembro de Tunacons ha desplegado más de 5.000 eco-FAD, fabricados con materiales vegetales, convirtiéndose en la prueba piloto más grande realizada por las flotas atuneras de todos los océanos, según Guillermo Morán, director ejecutivo de Tunacons.
¿Cuánto ha invertido Tunacons en plantados ecológicos en los últimos cinco años?
Más de dos millones de dólares en el desarrollo, validación e implementación de plantados ecológicos o eco-FAD, fabricados con materiales biodegradables, sin plásticos y no enmallantes. Esta inversión ha incluido investigación aplicada, desarrollo de prototipos, fabricación y prueba de más de 5.000 unidades en la flota atunera, además de la capacitación de tripulaciones y la logística para su despliegue en el océano Pacífico oriental.
¿Para qué sirven los plantados?
Son dispositivos flotantes utilizados por la pesca de cerco para atraer atunes, aprovechando su comportamiento natural de agregarse alrededor de objetos en el mar. Su uso permite a las embarcaciones localizar cardúmenes con mayor eficiencia, lo que se traduce en una pesca más selectiva, con menor esfuerzo operativo, reducción en el consumo de combustible y una menor huella de carbono.
¿Los plantados ecológicos son más costosos que los tradicionales?
Sí, los eco-FAD tienen actualmente un costo superior al de los plantados convencionales, ya que están elaborados con materiales 100 % naturales y biodegradables, como abacá, caña guadúa, madera de balsa y textiles sin plástico. Estos insumos requieren procesos artesanales y controles de calidad más estrictos. Sin embargo, generan un ahorro ambiental importante al evitar la contaminación plástica marina y reducir el riesgo de enredos con especies vulnerables. A su vez, fortalecen el cumplimiento de requisitos ambientales exigidos por los mercados internacionales, especialmente en la Unión Europea, lo que representa una ventaja competitiva para las exportaciones sostenibles.¿Cuáles han sido los resultados en conservación por la migración hacia plantados ecológicos?

Aunque la implementación total de los eco-FAD en la flota aún no se ha consolidado —y se prevé avanzar significativamente a partir de 2026, conforme a la nueva resolución de la Comisión Interamericana del Atún Tropical (CIAT)—, los avances obtenidos hasta ahora evidencian beneficios concretos en conservación marina, como la reducción del riesgo de enredos de tortugas marinas, tiburones y mantarrayas, la eliminación progresiva de residuos plásticos marinos asociados a los FAD tradicionales, la contribución al mantenimiento de la certificación del Marine Stewardship Council (MSC) y la mejora de la imagen ambiental del país y de la industria ante Gobiernos, ONG y consumidores responsables.
¿Cómo este tipo de plantados aporta a la economía de artesanos en el país?
Cada eco-FAD involucra una cadena de valor inclusiva y descentralizada, generando empleo en distintas regiones del país. Agricultores de la Costa y Amazonía cultivan materias primas, como abacá, caña guadúa, palo de balsa y caucho natural; artesanos textiles de la Sierra elaboran las telas biodegradables, lo cual representa un ingreso estable para decenas de familias; talleres de carpintería costeros ensamblan las estructuras flotantes y mujeres artesanas elaboran sogas y amarres con fibras naturales.
Este modelo impulsa la economía circular, dinamiza economías rurales y refuerza el componente social de la sostenibilidad pesquera.
¿Qué otros aspectos incluye el proyecto de mejora pesquera de la flota atunera ecuatoriana?
El proyecto de mejora pesquera (FIP) liderado por Tunacons abarca acciones integrales alineadas con los tres principios del estándar del MSC. Entre ellas está la colaboración científica con la CIAT y autoridades nacionales para mantener las poblaciones de atunes en niveles sostenibles; programas de marcaje satelital y estudios sobre la supervivencia posliberación de tiburones y rayas; la aplicación de protocolos de liberación responsable, como el programa Tripulantes al Rescate; cobertura del 100 % de observadores a bordo en toda la flota certificada; capacitación continua a capitanes y tripulaciones en buenas prácticas de pesca y la implementación de sistemas de trazabilidad digital y herramientas, como Global Fishing Watch, para garantizar transparencia operativa.
¿Cuántos barcos y empresas conforman la flota atunera ecuatoriana y Tunacons?
La flota industrial de cerco del Ecuador está compuesta por aproximadamente 116 embarcaciones. Tunacons agrupa a 10 empresas pesqueras de Ecuador, Panamá y Estados Unidos, que operan 58 buques certificados por el MSC. Esto convierte a Tunacons en el grupo más grande del océano Pacífico oriental con certificación de pesca sostenible para las tres principales especies de atunes tropicales.
¿Qué otras iniciativas de conservación tiene en planes Tunacons?
Además de los eco-FAD, impulsamos diversas iniciativas para fortalecer la sostenibilidad marina, como alcanzar el 100 % de adopción de plantados ecológicos en toda la flota certificada antes de 2030; ampliar el programa de recolección de FAD encallados, especialmente en zonas sensibles, como Galápagos y el Pacífico central; consolidar el programa Pescando Plásticos, en alianza con Fenacopec, para la limpieza de manglares y costas; apoyar la operación del centro de recuperación y anidación de tortugas laúd, en cooperación con la fundación Contamos Contigo Ecuador; fortalecer el uso de monitoreo electrónico con inteligencia artificial para mejorar la fiscalización y la gestión pesquera, y apoyar a la pesca artesanal del país para implementar procesos de sostenibilidad similares a los de Tunacons con proyectos de mejora pesquera. (I)
Fuente:El Universo